Consultamos al Ingeniero Pablo Farina, sobre las instauraciones de cultivos de maíz, realizadas el año pasado que fueron cosechados recientemente.
Nos decía que utilizando el paquete tecnológico de nutrientes necesarios para grandes rendimientos, considerando los costos de rentas de campos, laboreos, combustibles, impuestos, horas de trabajo y todo los costos a incluir, los costos rondarían los 5500 a 6000 kilos por hectárea. Estos costos son establecidos con los valores actuales de las cotizaciones internacionales del grano.
Dado este panorama, nos expresaba Pablo Farina: “los cultivos en secano no provistos de riego dependen de manera excluyente de cantidades considerables de lluvias alrededor de 700mm en el ciclo del cultivo”. “De no producirse estas lluvias, el productor no solo no obtiene ganancias, sino que se enfrenta a grandes pérdidas por conceptos del poco rendimiento del cultivo”.
No obstante estos obstáculos mencionados, nos comentaba que :” las lluvias para este cultivo son imprescindibles en ciertas etapas del cultivo más que otras ", refiriéndose en una etapa de crecimiento que se producía en diciembre. Era muy contundente en decirnos que si en esa etapa el cultivo no recibe las lluvias que necesita ya se comprometerían los resultados finales del cultivo.
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